Cada muro industrializado puede realizarse por separado en longitudes de hasta 10m. Esta medida es muy interesante para el transporte especial en góndolas, pues estas permiten llevar cargas con longitudes de hasta 11m. Por supuesto que se pueden realizar medidas más pequeñas, esto irá en función del diseño particular e individualizado de cada una de las habitaciones que se dispondrán a lo largo de los 3km de recorrido que ocupa el complejo.

El ensamblaje entre muros se realiza de forma mecánica mediante grandes tirafondos que se anclan entre sí en la unión física de unos muros con otros. Del mismo modo, se anclarán los muros al forjado, apartado este que veremos más adelante. 

Lo que hace posible que la dirección del muro crezca constructivamente en todas direcciones de forma fácil y sin limitaciones, tanto a lo largo como a lo ancho, o cree cuantos quiebros se quiera, son las colocaciones adicionales de bastidores de madera en las orillas de cada muro. Se crean con la intención de darle el inglete y crear cambios y movimientos en fachadas. Estas estructuras de madera en las orillas de cada muro hacen posible un diseño con libertad de movimientos formando muros en escuadra y con libertad de ángulos.

Resumiendo: somos libres en cuanto al diseño.

La altura cada uno de los muros, por el condicionante del transporte y los puentes no debiera superar nunca los 3,20m. No obstante, la unión en altura de unos muros con otros es muy fácil, pudiendo realizar fachadas con superposición de muros, una vez terminada la obra, de hasta 8 ó 10 metros sin problema.

Con este sistema huimos (o no), de ajustes estándar y podemos personalizar cualquier vivienda. Por el contrario, y dependiendo de las necesidades del proyecto, también se pudieran estandarizar sistemas que nos den finalmente habitaciones diferentes.

Cada habitación puede buscar un interiorismo distinto y sin embargo si nos permite el diseño conseguir la máxima estandarización.